Esta semana hemos empezado a darle a Ignasi «comida normal» (en lugar de papillas) a la hora de comer. Hasta ahora le habíamos dado a probar de nuestra comida muchas veces y siempre le ha gustado todo. Así hemos ido viendo que la mayoría de platos los puede masticar ya perfectamente y disfruta haciéndolo. Lo único que todavía le cuesta es la carne un poco dura, porque aún no le han salido las muelas.
Como se levanta y desayuna bastante tarde (casi a las 9) la mayoría de días come casi a las 2, justo antes que nosotros. Así que hemos decidido estos días comer todos a la misma hora para sentarlo en la mesa con nosotros y ponerle un plato más.
El menú de ayer fueron macarrones con tomate y carne picada. Le pusimos unos cuantos en su plato y se los pinchábamos con el tenedor y él (con ayuda) se lo llevaba a la boca. Resultado: todo un éxito.
Hoy hemos hecho un menú un poco más elaborado: pescado con arroz. Le ha encantado y en general se lo ha comido muy bien, aunque al final de la comida siempre acaba el suelo lleno de trozos que han caído del tenedor o han sido lanzados en plan proyectil:
Habrá que tener paciencia y tener la escoba a mano no? 😛
Hasta ahora la «comida normal» era siempre un extra después de la papilla así que se lo toma como un juego. Supongo que tiene que acostumbrarse que ahora esto es la comida y hay que aprovecharlo todo jeje
Ya os iré contando cómo va el proceso, aunque por suerte este niño nunca ha tenido problemas con las comidas.
Que paséis una buena semana!